Retos para las Entidades Aseguradoras en 2019: entorno socioeconómico y digital

Retos para las Entidades Aseguradoras en 2019: entorno socioeconómico y digital

Después de la primera parte de este análisis sobre los principales retos del sector seguros para 2019 –Retos para las Entidades Aseguradoras en 2019: entorno normativo-, en esta segunda entrega ponemos el foco en el entorno socioeconómico y en el retos derivados de la transformación tecnológica y digital.

Entorno socioeconómico

Existen algunas variables macroeconómicas importantes para el sector asegurador como el impacto a largo plazo del entorno persistente de bajos tipos de interés y el incremento de la longevidad que afectan significativamente a las entidades, provocando la reducción de sus márgenes

Las personas mayores constituyen, cada vez más, una proporción más elevada de la población. Por tanto, las previsiones de evolución demográfica, así como la inquietud sobre la viabilidad del sistema de pensiones, obliga a las aseguradoras a ser flexibles y adaptar sus productos y servicios a los cambios del entorno para dar respuesta a las necesidades de una sociedad más longeva. Así los productos relacionados con la prevención, la atención de la salud, el apoyo a la dependencia y la jubilación tendrán un desarrollo importante en los próximos años.

En el contexto socioeconómico actual, las entidades aseguradoras deberían considerar que la innovación, la flexibilidad y su adaptación a la realidad socioeconómica son elementos clave para el éxito futuro.

Retos tecnológicos y digitales

Por último, el impacto de las nuevas tecnologías es quizá la variable que tendrá un mayor efecto en el sector asegurador. Según una encuesta, el sector asegurador es el tercer sector que más se verá impactado por la tecnología en un futuro inmediato, y es, por tanto, una de las mayores preocupaciones de los Directivos del sector que consideran la innovación clave para el éxito futuro.

He identificado tres grandes cambios tecnológicos y de comportamiento digital que, combinados entre sí, revolucionaran profundamente el sector asegurador:

  • El primero tiene que ver con los cambios en el comportamiento del consumidor

Conectar con los jóvenes clientes, nativos digitales, a través de la tecnología se ha convertido en un desafío para las compañías del sector, los canales tradicionales irán perdiendo fuerza e irán ganando peso nuevas formas de relación con los clientes más cercanas, rápidas e inmediatas como el uso de los dispositivos móviles, las redes sociales y el desarrollo de aplicaciones ad-hoc.

Adicionalmente el sector tiene que adaptarse y desarrollar nuevos productos y servicios que se adapten a los nuevos riesgos y a las necesidades y demandas de los clientes, como ciberriesgos; coches autónomos; microseguros; uso de la tecnología para el diseño de productos a medida de cada usuario (pay as you drive, pay as you life…)

  • El segundo tiene que ver con los avances tecnológicos

La capacidad de análisis de ingentes cantidades de datos, Big Data, permitirá a las entidades una mayor segmentación de los clientes y una mejor selección de los riesgos. Lo que permitirá mejorar la competitividad y los márgenes de las aseguradoras y permitirá crear seguros que se adapten mejor a las necesidades de los clientes.

El uso de la Robótica y la Inteligencia Artificial permitirá mejorar la eficacia y la eficiencia de las entidades, permitiendo la simplificación de sus procesos, el ahorro de costes y la reducción del riesgo de fraude.

  • El tercero viene motivado por la entrada de nuevos competidores en el mercado

Tal y como está pasando en la banca y en otros sectores, las entidades aseguradoras se ven amenazadas por nuevos players como son las “Insurtechs”, que utilizan la tecnología para conquistar nichos de mercado y simplifican la prestación del servicio a los clientes, aumentando su satisfacción a precios muy competitivos. Estas compañías han experimentado un crecimiento exponencial en los últimos dos años.

Por tanto, las entidades aseguradoras deberán hacer un esfuerzo interno importante de adaptación de la cultura de las organizaciones, a la nueva realidad tecnológica y a las nuevas necesidades de los clientes. Reinventarse y aprovechar las oportunidades que brinda la tecnología será clave para mejorar el posicionamiento de las entidades en el futuro.

Isabel Velázquez